Edith Maldonado

Hermana

La educación como misión

Edith Maldonado

Hermana

¿Cómo la acompaño?
Fernando se vino de Paraguay a vivir a la Argentina cuando tenía 9 años. Edith lo adoptó como si fuera un hijo más. “Al final tuve tres hijos”, dice con una sonrisa. Sus otros dos hijos, eran los que compartían todas las actividades cotidianas con Fer. Edith fue la que lo anotó en una escuela técnica y la que lo acercó a la Parroquia de Caacupé para que tuviera un espacio de contención y crecimiento personal, lejos de la calle.
Las frases que hablan por sí mismas
● “Mi papá siempre nos enseñaba cómo teníamos que ser cuando fuéramos grande y hoy en día me sirve todo lo que me decía. Yo traté de enseñarles lo mismo a mis hijos, yo no les dejaba salir a la calle, yo siempre les buscaba muchas actividades como las que hacen en Exploradores”
● “Mi papá me dijo que a Fer le gustaba estudiar, y él decía que si valía la pena, teníamos que hacer el esfuerzo para que lo pudiera hacer. Perla me ayudó bastante con los chicos, o le daba cosas a Fer. Entre todos los hermanos. Y así es como él llegó a ser lo que es ahora y ahora todos estamos recontra orgullosos”

Santiago Pusso

Profesor de música

Salir al mundo

Santiago Pusso

Profesor de música

¿Cómo la acompaño?
Una de las pasiones de Fer es la música. De chico su sueño era ser cantante de cumbia y llegó a tener un grupo con algunos amigos. Cuando vio el cartel que decía “Taller de música” en la Parroquia, no dudó.
Ahí se encontró con Santiago Pusso, un profesor que le enseñó no solo a tocar la guitarra y a cantar, sino que le abrió la cabeza a otros mundos, a otras personas, o otras culturas. Y ese fue un quiebre en la vida de Fer, un joven muy entusiasta, curioso, con muchas ganas de aprender y de conocer otra gente.
Las frases que hablan por sí mismas
● "La música es una herramienta lindísima para desarrollar y fortalecer la personalidad. Es un lugar de vínculo con uno mismo, de expresión, de sentimientos, de búsqueda espiritual".
● "También es una excusa para el encuentro. En la escuela de música salimos a recitales, a encuentros, al cine, hacemos viajes. Son esos lugares en donde los chicos empiezan a conocer otros mundos, otras personas y otras vivencias. Uno va aportando lo que puede y los chicos con su propio interés van aportando el resto. Todos necesitamos salir de nuestro medio cuadrado y la gente que vemos siempre. La música nos permite viajar a otras culturas".

Padre Juan Isasmendi

Sacerdote de la Parroquia

Ser protagonista de su historia

Padre Juan Isasmendi

Sacerdote de la Parroquia

Fer encontró en la Parroquia un segundo hogar en el que pudo empezar a desplegar muchos de sus talentos. Participó del taller de música, de computación y se sumó al movimiento de Exploradores.
Isasmendi – que identificó fuertes características de liderazgo en Fer - fue como un segundo padre para él. Fer cuenta que podía hablar de cualquier cosa con “el gordo” y que siempre estaba ahí para darle un consejo.
El vínculo se fue afianzando y empezó un camino de acompañarse juntos.
Las frases que hablan por sí mismas
● “Lo que vi en Fer era una gran capacidad de aprender. Siempre se destacó mucho en eso. Una vocación de crecimiento. El fue no solo recibiendo sino en un momento a provocar las oportunidades que eso es una nota distintiva del líder. En algún momento hizo un proceso de transformación más honda y empezó a soñar desde otro lugar y ese fue el salto de calidad de él”.
● “Siempre fue un tipo muy agradecido con la vida, aunque la vida no siempre había sido fácil. Tuvo mucha más capacidad de dejarse acompañar que de acompañar. Y esa fue la fuente de su fecundidad”.

Teodelina Basavilbaso

Coordinadora del taller

Amor por el periodismo

Teodelina Basavilbaso

Coordinadora del taller

Teodelina Basavilbaso y María Ayuso era las coordinadora del taller de periodismo de la Parroquia de Caacupé. Hasta allí se acercó Fer con ganas de aprender, porque siempre le había gustado escribir.
Con el tiempo se dio cuenta de que esa era su vocación y de que lo que más le interesaba era poder hablar con la gente del barrio, entrar a sus casas, conocer sus problemas, darles voz.
Decidió que quería estudiar periodismo, y Teode y María fueron pilares fundamentales para decidir a qué universidad ir, lo acompañaron a anotarse y lo ayudaron durante el primer año con cada trabajo que tenía que entregar. “Sin ellas no hubiera podido”, dice Fer.
Las frases que hablan por sí mismas
● “Cuando arrancamos pensábamos que los chicos no iban a querer escribir. Requería un cierto compromiso y no sabíamos que iba a pasar. Y los chicos seguían viniendo. Llevábamos mates y medialunas y así fueron surgiendo las notas.
● “A Fer le costaba lo que era ortografía y gramática pero siempre cumplía. Y te dabas cuenta que le apasionaba, que le interesaba mucho conocer los problemas de la gente”

Guido Medina

Compañero de trabajo

El sueño de la casa propia

Guido Medina

Compañero de trabajo

A Guido Medina, una especie de padre-tutor en el trabajo, Fer le dice cariñosamente “el viejo”. Medina hoy está jubilado pero compartió sus últimos años enseñándole a ver cómo funcionaba cada cosa en el trabajo y también a pensar en grande. Desde el primer momento le mostró un interés genuino por su crecimiento, sin importarle su lugar de nacimiento ni de residencia. Así fue como empezó a formar parte de la familia de Medina y Fer lo tomó como referente para consultarlo sobre las decisiones importantes que tenía que tomar.
La idea más importante que Medina introdujo en la cabeza de Fer, fue que podía aspirar a comprarse su propia casa.
Las frases que hablan por sí mismas
● “Empezamos a trabajar para ver qué es lo que habían aprendido en el colegio. El era medio renuente a decir en donde vivía. Hasta que un día me dice que vivía en la villa 21. ¿Y? Le contesté. Y me dijo que había gente a la que le gustaba y gente a la que no.
● “Un día en el trabajo Fer me dice: “Todo está muy lindo pero vos me llevarías a tu casa a almorzar o a cenar?” Y al otro día vino a almorzar, conoció a mi familia y así fue cambiando su manera de pensar”

Luis Vedoya

Ex director de Fundación Integrar

El salto a la universidad

Luis Vedoya

Ex director de Fundación Integrar

La Fundación Integrar fue la que becó a Fer para que pudiera estudiar Periodismo en TEA. Ahí conoció a Luis Vedoya, una persona que se transformó en un apoyo fundamental para no bajar los brazos cuando se sentía “sapo de otro pozo” en la universidad.
Las frases que hablan por sí mismas
● “Creo que Fer representa de una manera muy transparente y muy perfecta esa vocación de un joven que termina la escuela secundaria y no había una silla esperándolo en la universidad. Si bien la educación es pública y es un derecha, el camino no está hecho para que un chico de la villa pueda acceder. Ya sea por el boleto del colectivo o por las fotocopias o por los prejuicios que existen”
● “El status quo es por ahí terminar la escuela secundaria y probablemente empieces a trabajar de lo que hace tu padre o hacer changas. Romper ese orden es romper ese orden social. Cuando uno genera un asiento que no estaba destinado para alguien del barrio, y esa persona se sienta como cualquier otro, ahí juntás cosas que no se estaban juntando”.